El papayón es una fruta tropical que se cultiva en México, Ecuador, Brasil, India y Sudáfrica. Contiene muchas propiedades beneficiosas para el organismo, como vitaminas y fibra. Sin embargo, no todas las piezas son iguales. En este artículo vamos a darte los trucos para que detectes los mejores papayones. También vamos a explicarte cómo conservar el papayón.
¿Cómo elegir el papayón?
Lo primero que deberás tener en cuenta para escoger el papayón es la fecha en la que crees que vas a consumirlo. Si vas a comértelo ese mismo día, lo mejor es que cojas el que tenga un color entre amarillo y naranja con tonos brillantes. Fíjate muy bien que no tenga agujeros en su piel y que al presionarlo ligeramente con el dedo, este se hunda un poco. Así sabrás que la fruta está madura y lista para consumirse. En cambio, si lo que quieres es que aguante unos días, escoge mejor un papayón que tenga un color más verdoso, ya que significa que tardará aún unos días en madurar.
¿Cómo conservar el papayón?
La piel del papayón adopta diferentes colores según su punto de maduración. Esto te ayudará a saber cuándo está listo para comer o si necesita estar unos días más dentro o fuera de la nevera.
Si la piel muestra un color verdoso significa que el papayón aún no está maduro, por lo que deberás dejarlo fuera de la nevera durante unos cinco días o más hasta que esté en su punto. Si el papayón tiene algunas manchas amarillas deberás sacarlo de la nevera y dejarlo unos 4 o 5 días para que alcance su punto de maduración. Si la piel tiene una tonalidad mitad verde y mitad amarilla en dos o tres días estará maduro.
Cuando tenga un color entre amarillo y naranja estará listo y podrás comértelo en los próximos días. Cuando llega a este punto de maduración lo mejor es conservarlo en la nevera para que no madure en exceso, sobre todo si no quieres comértelo ya. Podrás guardarlo en la nevera hasta un máximo de siete días, más o menos.
¿Cómo guardar el papayón en la nevera una vez partido?
Una vez partido, el papayón se oxida con mucha facilidad y es importante protegerlo para garantizar su consumo en los siguientes días. Tapa con un paño o film transparente la parte interior de la fruta que ha quedado expuesta, introdúcela en un recipiente y guárdalo dentro de la nevera. Intenta colocarlo en la parte superior de la nevera, que es donde menos frío se genera.
Es importante mantener la pieza lo más entera posible y solo cortar los trozos que te vayas a comer. No retires la piel del papayón porque ayuda a que la fruta no se seque y pierda algunos de sus nutrientes.
Un indicador de que la fruta sigue en buen estado es el olor. Este no debe ser fuerte en exceso, ya que si no está indicando que el producto está demasiado maduro y su sabor es mucho más fuerte. Una manera de aprovechar el papayón si ha madurado demasiado es hacer un smoothie.
Congelar el papayón
Muchas frutas se pueden congelar para alargar su conservación, pero su sabor suele cambiar. Por lo tanto, te recomendamos este método de conservación solo si tienes pensado hacer batidos o cremas con el papayón.
Retira la piel del papayón con un cuchillo afilado y pártelo por la mitad. Con una cuchara sopera retira las semillas y la pulpa de su interior. Corta las mitades en cuatro trozos a lo largo y después haz pequeños dados de 2 cm aproximadamente. Introduce los trozos que has cortado en bolsas de plástico individuales y guárdalas en el congelador. Tendrás disponibles pequeñas raciones para comértelas cuando quieras. Mira en la puerta de tu congelador el tiempo que recomienda el fabricante para la conservación de frutas.
Ahora ya sabes cuánto tiempo puedes conservar el papayón y cómo elegir las piezas según el tiempo que vayas a tardar en consumirlo. Esperamos que te animes a probar esta fruta exótica y la añadas a tu dieta.